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viernes, 29 de julio de 2022

Impuesto, sanción o aportación

En respuesta y ampliación al editorial de El Comercio de hoy 29/VII/ 2022

Hay quien considera a la proposición de ley relativa al gravamen a los bancos y eléctricas, un impuesto y quien la considera sanción.

En una hipotética y educada sociedad, podría considerarse la posibilidad de que dicho gravamen fuera una aportación, de aquellas empresas con RSC* y ética a raudales, que salen beneficiadas, por diversas causas, en una crisis económica y social globalizada. Así hubiera sido si las empresas aportasen voluntariamente esos 7.000 millones de euros cada dos años al erario público a fin de reducir la desigualdad que nos trajo la guerra, la pandemia quizás consecuencia del cambio climático, la existencia de inoportunos oligopolios, el neoliberalismo económico, todo ello producto de la deseducación reciba globalmente desde hace casi 9 lustros, que se puede resumir en : "Tu sálvate y el que venga detrás que arree"

Pero como las empresas no disponen de semejante cantidad de RSC* ni suficiente ética, hay que aplicarles un impuesto para que la mencionada desigualdad social se reduzca razonablemente. Las constituciones observan medidas para ello y la nuestra también, que dice: "Toda la riqueza del país en sus distintas formas y sea cual fuere su titularidad está subordinada al interés general" Por lo que ésta propuesta Gubernamental, muchos la considerarían un impuesto.

Ahora bien, los defensores acérrimos de la libertad de mercado, es decir los neoliberales mencionados, defienden indirectamente la desigualdad social y por ende llaman sanción a lo que debería ser una aportación, que no puede ser por la deseducación social que existe y acaba siendo un impuesto para que esta sociedad no se deshaga con tanta desigualdad que pudiera producir una gran revuelta.

Entiendo que si  las explicaciones de Patxi López y Echenique del gravamen fueran lo suficientemente ideológicas, habrían constituido una Banca Pública y una Empresa Eléctrica Pública que compitiera con esas beneficiadas empresas por el actual sistema económico y comprobaríamos las bondades de la medida. El que si está ideologizado profundamente, pero no se dice, porque se descubre el pastel, es nuestro sistema económico. Claro que también podrían ampliar el período de aplicación del gravamen hasta recuperar los 60.000 millones de euros y sus correspondientes intereses para quedar realmente igualados, con la banca y eléctricas, que prácticamente tienen los mismos accionistas y así realmente tener una desigualdad más pequeña, pero nuestra mala educación nos lo impedirá ¿Verdad Sr. Director?

* Responsabilidad Social Corporativa

martes, 26 de julio de 2022

Vargas Llosa decía que votábamos mal ¿Sería por estas razones?

 ¿Qué idea, pensamiento, hecho o lo que sea, ha de darse para que una persona vote, sin pertenecer a ese 10 % muy rico y beneficiado de diversas tropelías, a personas que todos sabemos son corruptos, comprobado y demostrada su corrupción?

  1. No son todos recogemigas, que también los hay, esos que con tal de sacar tajada fastidian a quien se ponga por delante, cumpliendo así los requisitos exigidos y promocionados a través de todos los medios posibles, por neoliberales y derechistas conservadores.
  2. Tampoco tiene toda la responsabilidad el conservadurismo y la incomodidad de salir de la zona de confort de cada quien, pero alguna sí.
  3. Tener un bajo concepto de si mismo, una enferma sumisión por la educación recibida, que influye en el desconocimiento en el ejercicio del voto.
  4. Estar influenciados por los "medios de intoxicación" (léase para legos información, en lugar de intoxicación) que hasta intentaron poner a Podemos como los malos de la película, cuando son los únicos que apoyan medidas realmente sociales.
  5. Y la sarta de mentiras a mencionar:
  • a) La inversión en armas evita la guerra. No, no y no, la fomenta
  • b) ¿El PIB sirve? No, porque no mide el bienestar social, solo la riqueza, que no se sabe donde va, bueno sí, pero no se dice ¿Porqué se usa?
  • c) La educación, que es básica, porqué se infrautiliza y se minusvalora, solo Ayuso fomenta la privada, es decir, educación para cuatro.
  • La sanidad pretende privatizarla hasta el PSOE ¿Y eso? Da dinero coño, sí.  ¿Pero a costa de quién y de cuantos?
  • Los medios de comunicación, en su mayoría, no son independientes ni profesionales ¿Para qué estudian los periodistas en la universidad pública? ¿Para defender luego intereses privados?
  • El Poder Judicial está ideologizado, cuando la ideología debería residir en cada juez, no en la institución.
  • Si existe una ley antiterrorista, tiene que existir una ley antidictadura, sobre todo de la franquista.

En fin con toda la mierda descrita en seis apartados, quizás pueda entenderse porque la clase obrera, que sigue existiendo, aunque algunos interesados, digan que no, vota a quien le perjudica social y económicamente, porque ya me dirán si "la libertad y cervecitas" de Ayuso está teniendo éxito socialmente hablando, en Madrid y los incendios en CyL le dan la razón a los  mastuerzus: Mañueco, su innombrable vicepresidente y al responsable consejero del ramo. De Andalucía no hablo, ya hablarán las crónicas. ¡Salud, amigos y enemigos! aunque en lugar de enemigos,  deberían ser rivales o simplemente contrarios en opinión.


jueves, 21 de julio de 2022

Proyecto de vida

Nuestro actual proyecto de vida

Seguimos destruyendo el planeta a la misma velocidad de siempre o quizás a más, porque no queremos ser conscientes de nuestra mala educación y actitud, por tanto, negligente.

Porque preferimos tener que ser, abandonando así la dignidad humana por el dinero y la

incomodidad y maldad consumista y egoísta.

Porque nos educan en el miedo y no para ser felices, sino para ser ricos, cuando lo único que poseemos realmente es el TIEMPO DE VIDA y en lugar de emplearlo en ser felices lo aplicamos a ser ricos, fomentando así la deseducación recibida y resumida en "Tu preocúpate de lo tuyo y a los demás que les den" perdiendo de esta forma la dignidad humana en favor del amor por un simple medio de pago: EL DINERO.

Este es nuestro nefasto proyecto de vida y digo yo que convendrá cambiar dicho proyecto, porque el que vivimos nos lleva sin solución a un desastre natural y mundial y es imprescindible cambiar, nos lo vienen advirtiendo científicos, ecologistas y demás sabios a los que no hacemos ni puto caso, porque el conservadurismo es muy cómodo y además eso de salir de la zona de confort da pereza.

Los cambios

Es difícil cambiar la forma de pensar, hay que empezar por abajo y los cambios como la democracia deben ir de abajo a arriba y no al revés. El proyecto Sumar de Yolanda Díaz es una buena forma para implementar un cambio, porque lo quiere hacer (a ver si le dejan) de abajo a arriba, escuchando y atendiendo desde abajo para aplicarlo arriba, esa forma es buena. O sea, estamos diciendo que hay que educar, pero educar bien, no como hasta ahora que la enseñanza es, como ya indiqué: "Tu preocúpate de lo tuyo y a los demás que les den" y no van por ahí los tiros, hay que disparar hacia la colaboración, la cooperación y el bien común, porque el estadio previo a la felicidad es el bienestar social y éste se perdió en los años 80 a costa del neoliberalismo imperante que fomentaron Margaret Thatcher y Ronald Reagan, 40 años de patrañas mentirosas diciéndonos que competir es mejor que colaborar, menuda tropelía, que se defiende en las facultades de Económicas (que digo yo, deberían llamarse de Crematística más bien) y además fomentando el crecimiento constante en una tierra finita, porque nuestra tierra es finita, limitada ¡coño! al igual que nosotros, que realmente solo tenemos nuestro tiempo de vida. Es inconcebible oír y ver a EMPRESARIOS diciendo que el beneficio empresarial debe ser cada año mayor y no se preguntan ¿hasta dónde y hasta cuando? Hay que ser un poco "cortito" para decir eso sin ruborizarse.

Estas estupideces y además mentiras, son apoyadas por todos los medios de "desinformación" a favor de esa oligarquía que fomenta el neoliberalismo con estas patrañas insostenibles.

Pues esto que estamos haciendo mal y además algunos se lo creen, es lo que hay que cambiar, que transformar.

Los empresarios se caracterizaban porque fomentaban los principios básicos de prudencia y duración de la empresa, con ellos la empresa era sostenible. Aunque últimamente la duración de la empresa está subordinada a la ganancia máxima y la prudencia carece de importancia por la misma razón, pero deja de ser sostenible, porque únicamente beneficia a sus propietarios; abandonando a todos los stakeholders (todas las partes interesadas en ella ) Cuando la empresa solo premia a sus accionistas y dirigentes y abandona a los clientes, proveedores y sociedad que la rodea ¿porqué debe seguir existiendo?  ¿porque beneficia a una minoría? Sabemos que daña a una inmensa mayoría, la acumulación de riqueza en solo el 1 % de la población es vergonzosa indignante, inmoral e irracional.

Es un básico error que un empresario persiga solo el máximo beneficio empresarial, éste será necesario para su subsistencia, pero no debe ser su objetivo. En esto hay que cambiar y decirlo claramente además en todos los medio de información no en los de desinformación, claro. 

El objetivo empresarial debe ser hacer un mundo mejor, no hacer pocos ricos y muchos pobres, que es lo que pretende desde el neoliberalismo económico desde hace 40 años. El crecimiento desmedido es un cáncer social, es al igual que en la enfermedad el crecimiento desaforado de ciertas células que acaban matándolo todo, la persona y el planeta.

La educación

Además de cambiar el criterio empresarial debe cambiar el criterio popular del consumismo, dejar de tener y cultivar más el ser, es fundamental.

La educación es el pilar de una sociedad que aspire a través del bienestar social a la felicidad. Por ejemplo es inconcebible y que se le dé credibilidad a PISA estudio creado por la OCDE una organización económica que no tiene ni puta idea de educación, solo fomenta el ya criticado crecimiento infinito en una tierra finita y la competitividad entre seres eminentemente sociales.

Estos básicos y fundamentales detalles hay que cambiarlos, luchar contra ellos y hacerlos desparecer.

No tiene ningún sentido enseñar a los jóvenes que deben competir con sus congéneres para destacar socialmente, ser más ricos que el vecino, cuando sabemos que esto produce desigualdad y escaso bienestar social, en cambio la colaboración y cooperación aportando al bien común no nos hace iguales porque no lo somos, pero si facilita más igualdad en las  oportunidades a cada uno y ofrece acceso a la cultura y bienestar social a todos.

Se sabe ciertamente que el triunfo empresarial,  en esta sociedad enferma, es el monopolio y el segundo puesto lo lleva el oligopolio, lo que conlleva haberse cargado a toda la competencia de nuestro ámbito socio económico ¿Es esto realmente un éxito? Que disfrutan accionistas y directivos de dicha empresa a costa del bienestar del resto de la población de sus stakeholders antes mencionados.

Y finalmente voy a añadir una aportación de Juan Manuel Martín Martín miembro de la Coordinadora Manifiesto2020 y del Grupo local Valladolid Economía del Bien Común

" Un juego, y no por ello deja de tener su importancia. Os planteo una pregunta de Rutger Bregman (joven sociólogo que puso firme hace unos años a los asistentes de Davos).
Supongamos que aparece en el mercado una nueva droga extremadamente adictiva que, en poco tiempo, se extiende por todas las capas de la población. Los científicos estudian su composición y sus efectos y llegan a la conclusión de que la nueva droga, cito textualmente, provoca “una percepción errónea de los riesgos, cuadros de ansiedad, pensamiento negativo, desamparo adquirido, desprecio a los demás, hostilidad frente a otros grupos y pérdida de sensibilidad”.
¿Usaríamos esa droga? ¿Les permitiríamos a nuestros hijos que la probaran? ¿Sería legal?.
Las respuestas son si, si y si. Porque estoy hablando de uno de los productos más adictivos de nuestro tiempo. Una droga que consumimos a diario, que suministramos en grandes cantidades a nuestros hijos y que se financia en gran medida con dinero público.
Se admiten respuestas (si no habéis leído el libro)!!!!
¿De que droga está hablando?"

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lunes, 11 de julio de 2022

Nos están robando

 Con ese título, un abogado escribe en El Comercio del lunes 11 de Julio que: "el Estado es una institución de robo a gran escala y que los impuestos son tan solo un sistema que sirve para que los políticos y burócratas roben el dinero de los ciudadanos y los despilfarren de manera vergonzosa" -añade- ¡Que gran verdad!

Y se queda tan fresco. Puntualiza más adelante "el Gobierno de Pedro Sánchez nos roba todos los días" y remata con "Por pagar, pagamos hasta la tarta y los zumos de naranja naturales que se toma Irene Montero en el Ministerio"

Digo yo que no quiso tener en cuenta el señor letrado, las bondades del Gobierno que critica tan duramente, como: Rebaja del IVA de la luz, bonificación de los carburantes, incremento de pensiones no contributivas, Ertes que salvaron empresas y trabajadores, SMI más digno, contratos indefinidos, reducción del paro e incremento de cotizantes a la Seg. Social.

Claro que seguramente estaba pensando en el Gobierno de M. Rajoy (quizás aún, desconocido para la judicatura) y en la corrupción de su partido y de la mayoría de los Ministros suyos y de Aznar, las cloacas de su Estado, que además atentan contra la propia democracia del país y cuyos brazos se extienden a la Policía "patriótica", parte del Poder Judicial, ciertos medios de comunicación, o más bien de intoxicación, todo ello aliñado, como no podría ser de otra manera, porque lo requerían las circunstancias, desde un Gobierno que también pagábamos todos y se dedicó en exclusiva a gestionar y fomentar las mencionadas acciones de corrupción, las cloacas del Estado y esto, esto es lo verdaderamente caro y que pagamos todos, señor letrado.

Tachar al Estado de ladrón cuando lo dirige quien a usted no le gusta, no es un argumento político de peso, es propaganda barata y basura a la que nos tenía muy acostumbrados los gobiernos del PP y su prensa afín, desde las mencionadas cloacas del Estado, que tan magistralmente manejaban en el PP.

Lo caro para un Estado y un Gobierno, son las ya mencionadas: corrupción y cloacas, la economía sumergida y la existencia de guaridas fiscales, que no paraísos, así los denominan sus creadores. Y la falta de ética, solidaridad, dignidad y democracia participativa. Esto es lo auténticamente carísimo y lo tenemos que pagar todos, además de soportar sus nefastas lecciones políticas.

martes, 5 de julio de 2022

Los partidos políticos están perdiendo una gran oportunidad

 Son problemas sociales aceptados mundialmente: la desigualdad social, el cambio climático, la escasez de energía y fomentados todos por la globalización parcial y el capitalismo.

Porqué, al menos los gobiernos demócratas, no intentan revertir realmente esta situación. Sería una inteligente propuesta porque, además, no nos queda otra solución; más pronto que tarde, escaseará la energía y tenderemos que aprender a gastar menos. También sabemos que las sociedades desiguales son muy injustas y problemáticas y que atentar constantemente contra la naturaleza a cambio de ganar más dinero consumiendo exageradamente, es una fracasada actitud a largo plazo, que nos lleva más deprisa al desastre social, ecológico y económico.

Está demostrado, porque el ser humano es un ser social y ha de vivir en sociedad, que es mejor colaborar que competir. Porqué se nos inculca la competición cuando es peor que la colaboración. ¿Dónde está la justificación de esa enseñanza?

Decía que espero de los gobiernos demócratas ese imprescindible cambio para revertir esta situación; pero antes, los partidos que formarán esos gobiernos son los que habrían de anticiparse a esa inteligente y novedosa actitud. No hacerlo sería seguir engañando a sus militantes y votantes.

No sirve la disculpa de que el actual sistema es el único posible, esa cantinela que Reagan y Thatcher se inventaron ya se sabe falsa de toda falsedad. Demostrado después de demasiado tiempo.

También se comprobó que el mercado soluciona algunas necesidades, pero no todas. Luego ha de ser vigilado, solo no funciona.

Además haciendo lo mismo, si no cambiamos nada, obtendremos más de lo mismo y esto también está más que comprobado. ¡Hay que cambiar! Sino vamos al abismo

Todos estos modelos alternativos ya están desarrollados vean: 

Yo me inclino por la Economía del Bien Común EBC, por ser el más completo, es holístico y por eso abarca todos los ámbitos: social económico y ecológico. Y se basa además los siguientes valores: Dignidad humana, Cooperación y solidaridad, Sostenibilidad ecológica, Justicia Social y Participación democrática, valores que observan las constituciones democráticas y su metodología puede aplicarse indistintamente a personas, empresas, municipios, administraciones públicas y asociaciones.

Supongo que los partidos más progresistas y por ende menos conservadores serían los primeros llamados a implementar esta imprescindible por necesaria novedad política. ¿A qué esperan?

Esta muestra de inteligencia innovadora será bienvenida porque es la solución necesaria. O ye que non hay güevos a cambialu