Después del enfangado debate televisivo (y con esta premisa intelectual ya veremos en el siguiente a Abascal) el argumentario de Feijoo es tan exquisito, que en plena campaña electoral se va a por los votantes de Vox, porque ahí tiene el campo sembrado para su argumentario: simple, corto, mentiroso e irracional.
Lo expuesto es lógico razonando las siguientes actitudes políticas de la derecha nacional:
a) Cualquiera sin dos dedos de frente y sin tiempo para la razón, votará a un compulsivo
mentiroso, ya que a ti también te va a mentir y más, a quien cultiva amistades que aún peligrosas son narco-mercantilistas.
b) Es difícil catalogar, medir y comprender un votante de la corrupción que la fomenta votando una organización juzgada y condenada por tal motivo.
c) Finalmente si existe persona u organización social que confluya en todas estas "virtudes humanas" citadas, la cuestión es ¿de psiquiatra? No, de derechas.
d) Podemos finalizar la propuesta a votar en este país, añadiendo que están en posesión de las ya nefástamente por famosas, cloacas policiales partidistas, apoyadas por cierta judicatura devenida del más rancio franquismo fascista.
Todo esto puede usted apoyarlo votando un solo partido, votando al PP
A todas luces, incomprensible, porque las encuestas dicen que ganará. ¿incomprensible o tal vez mentira?
Como diría mi admirado Forges: ¡¡¡País!!!
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