Después de 8 lustros de políticas neoliberales, aún aplicadas por gobiernos socialdemócratas, como en España y visto los resultados habidos: Precariedad laboral, desigualdad social y desaparición de la sociedad del bienestar; pues la política que se busca por una parte social es revertir esto. Salvo, claro está que seas rico o no muy listo.
Por tanto el sistema económico a que aspiramos es al que tenga en el centro las personas y no las ganancias empresariales, el indice del bienestar social y no el PIB y además no prime la voluntad empresarial por encima de las normas emanadas del parlamento. Eso que llaman torticeramente libertad del mercado, que es una enorme patraña.
Se dice que los empresarios son creadores de riqueza, olvidando (adrede) siempre a los trabajadores y todos sabemos que unos sin los otros no son nada. Tal es así, que en los países nórdicos y por ley los trabajadores, tienen lugar en el consejo de administración de las empresas, sobre todo en las más grandes. Y paradójicamente, en este país que tenemos una de las mejores cooperativas del mundo no se fomenta el cooperativismo, porque tenemos una clase dirigente temerosa de que les recortes sus puertas giratorias.
Es imposible aspirar a una vida mejor sin sanidad ni educación, por tanto y para que cada individuo socialmente tenga derecho a ambas cosas la sanidad y educación deben ser públicas y de calidad. Estos son dos bastiones primordiales para obtener una sociedad avanzada.
La vivienda es un derecho antes que un bien mercantil y el trabajo otro, por lo que no debe ser mercantilizado, no hay porqué acudir a un mercado para obtenerlo, se ha de promover en función de las necesidades sociales comunes y en relación directa con el último estadio de la educación, para fomentar así el bien común.
El sector financiero, debe tener una alta fiscalidad cuando su objetivo sea la especulación, porque ésta es la lacra económica más importante y contra la que hay que luchar pues parasita la economía y por ende la sociedad en general, fomentando la inflación y la desigualdad a raudales. Su actividad es de las más improductivas y más beneficiosas, porque cuenta con la favorable legislación de los diferentes gobiernos y la creación de las guaridas fiscales. Por tanto la banca además de ética pública y nunca dedicada a especular, solo a financiar éticamente.
A mi me vale cualquier programa que contenga esto, pero tu puedes poner aquí lo que creas que falta.
¡Salud!