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miércoles, 25 de febrero de 2015

¡¡ Despierten, por favor!!

Es una situación histórica única, el fin de neoliberalismo, mejor dicho, el fin del capitalismo por el neoliberalismo económico.
Vamos tomando conciencia poco a poco, a través de la tecnología, la ciencia pura y la sociológica que no es posible mantener eternamente un incremento de la producción y por ende del consumo, cuestión que deviene del principio económico capitalista, dogma más bien diría, que dice que: la empresa debe perseguir siempre el máximo beneficio ¿Por qué? ¿Para qué? Esto no es una utopía, ésta la estamos viviendo
Esta máxima, principio o dogma (la empresa debe perseguir el máximo beneficio) se enseña en las facultades de económicas de todo el mundo, con un desalmado y premeditado adoctrinamiento que avergonzaría a cualquier auténtico hombre de ciencia, profesor o catedrático en la materia, que no son capaces, y no entiendo por qué, de introducir alternativas económicas, que las hay, al capitalismo. Se comportan como religiosos en cada una de sus religiones, solo es su capitalismo el único y el verdadero sistema, despreciando cualquier alternativa posible ¿Por qué? Quizás para arreglar áticos de obispos cuando faltan pisos para los humildes.fin mundo
Qué torticero interés puede haber para que la economía no haya evolucionado en las facultades ni un ápice en los últimos decenios. Como muy bien expresa Paco Álvarez se entiende por economía “únicamente aspectos como la evolución de los mercados financieros, la deuda pública o privada, el PIB, el déficit de los estados” añado yo, el IBEX 35 con el que cada mañana nos dan la tabarra.
Parece que es fácil entender los poderosos intereses que hay detrás de la economía, de la mal formada economía y lo explica Niño Becerra en esta entrevista donde parece dejar claro que la oligarquía mundial está impidiendo la evolución económica y por ende social de nuestro planeta. ¡ Despierten, por favor! Si dejamos pasar mucho tiempo sin tomar cada uno de nosotros conciencia de esta estafa económico social que sufrimos, vuestros nietos os lo demandarán, yo no tengo.