Desde algunos medios de comunicación se critica a los políticos de hacer teatro en el parlamento y en la vida política en fin.
Ellos, esos periodistas que lo critican dejan de pensar en la política, para pensar el las personas que la ejercen y así ellos también se dedican al teatro periodístico.
Dejamos todos de pensar en el fundamento, en la cuestión.
Los políticos no piensan en los ciudadanos, pues es a quienes deberían dedicarse y los periodistas pierden de vista los hechos para fijarse en las formas.
¡¡¡Todos al teatro!!!
Después de tanto teatro de la vida, sería interesante una encuesta entre los votantes de las próximas elecciones, para valorar cuantos de estos conocen, aún someramente, el programa político votado.
Y comparar la encuesta con otra sobre el conocimiento de cada votante sobre su equipo de fútbol favorito. Seguro que el conocimiento del club deportivo admirado y el "club político" votado difieren profundamente.
Pero ¿cual es realmente importante para la vida? La vida es puro teatro o alguien hace que lo sea.