Y ahora nos sorprendemos por los incendios que sufrimos, cuando los científicos llevan
avisándonos años, muchos años, de este cambio climático, ¿que ahora nos sorprende?
¿Nos hacemos los sorprendidos?
De él ciertamente ni la mayoría de los ciudadanos, ni mucho menos los políticos nos quisimos enterar ¿Por qué?
... Y el sistema económico qué opina de esto
Pues porque el sistema económico en que habitamos, es el árbol que no nos deja ver el bosque. Ese caduco sistema llamado capitalismo, el árbol.
El bosque que tenemos que ver es además del real, el que se quema, la desigualdad social, la injusta remuneración del capital frente a la remuneración laboral y la falsa meritocracia que no se cree ni dios, Además de la desvergüenza injusta de los impuestos a los más ricos, es decir la falta de progresividad impositiva.
Sistema crematístico más que económico, que nos mantiene muy atentos, demasiado atentos, a una quimera, como tal imposible: Ser todos ricos. Tonta engañifa que solo lleva a la destrucción, la guerra a través de la competitividad y enfrentar al último con el penúltimo. Una estúpida tragedia muy popular.
Ya se dan cuenta que nos mantienen en un limbo haciéndonos creer que somos libres por poder tomarnos una caña, después de 15 horas de trabajo y perseguir la quimera de ser más que el vecino, tener un coche más grande y potente o ser el primero de la clase, en fin, en competir el último contra el penúltimo. Cuando lo razonable socialmente es cooperar entre nosotros. Falta mucha cultura cooperativista, sobre todo teniendo como ejemplo el cooperativismo de Mondragón, ejemplo mundial que en España no conoce ni dios.
Los imprescindibles impuestos para que la sociedad sea avanzada
Además, no pagar impuestos, que nos cuentan, son un atraco y no sirven para nada. Ahora que todo dios clama por más medios para combatir los incendios, la atención a un cambio de la climatología, negada por los partidos de la derecha, que recortan presupuestos en esa atención para dedicarlos, por ejemplo a la mal llamada fiesta nacional: Los toros. Tortura sin igual, que decaerá como el tirar la cabra del campanario, que cerca le anda en su sin razón.
Hay que analizar las políticas con espíritu crítico y sentido común y las obsoletas, como las que lleva practicando la derecha, desestimarlas por eso mismo, por obsoletas.
Vemos como la política que nos viene explicando con hechos probados la derecha y la ultra derecha, está teniendo unos "resultados maravillosos": Solo hay que analizar la Dana Valenciana y los incendios en Galicia y Castilla y León, Autonomías gobernadas por el PP y Vox y analizar igualmente los presupuestos o más bien los recortes en ellas practicados por dichas entidades políticas "para beneficio de TODOS" o más bien para su beneficio privado.
Cuestión que Emilio Romero explicó en su día con total claridad. La derecha tiene que mentir, porque ha de hacer política para defender los intereses de 200 familias exclusivamente y claro, eso sin mentir al resto de la población es imposible.
Solo precisamos más democracia directa
Únicamente precisamos democracia real, participación directa en ella e información sin deformación política colateral ni partidista. Que nos cuenten las noticias como son, que nos las relaten de forma veraz y nos dejen decidir, defendernos y no nos perviertan con necedades innecesarias.