El Programa de Evolución Internacional de Estudiantes, por sus siglas, como siempre en inglés, PISA, lo hace la OCDE (hoy va de siglas) la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, una organización eminentemente económica, que valora la calidad de la enseñanza a los jóvenes del mundo.
¿No les parece, como mínimo, muy raro que una organización económica valore la calidad de la enseñanza de nada que no sea economía?
El objetivo será entonces que se valore bajo un criterio económico y no de cultura ni de calidad de enseñanza que debería ser y valorado por profesionales de la educación, digo yo.
La OCDE es una organización con 60 años de experiencia, dedicada (según su definición) a construir políticas para mejorar la vida.
Conclusión después de la definición: La OCDE es menos eficaz que el FMI, Fondo Monetario Internacional. Ambas defensoras del capitalismo salvaje, que nos trajo hasta esta desigualdad económica mundial, pura hipocresía a nivel internacional
Esta sinrazón de la medida del bienestar social, educativo o cultural a nivel mundial se basa en la perversión de la definición de Economía que se llevó a cabo a través de todas estas organizaciones internacionales, para apoyar la frase del exdirector del FMI español: "... es el mercado, amigo" que lo justifica todo. Todo lo malo que podemos aguantar sin justificación razonable.
La Economía se convierte en crematística para poder llevar a buen fin ese salvaje capitalismo.
Y en las facultades de crematística, llamadas de económicas, se imparten los criterios que benefician esta malvada teoría económica que solo crea desigualdad, como queda demostrado.
Así las cosas ¿Cómo nos vamos a creer el informe PISA? Si sus actores solo son creíbles a pies juntillas, bajo la teoría económica del Capitalismo más salvaje.
Más bien PISA propone la creación de trabajadores en lugar de personas realmente formadas. Y con el agravante de que crean trabajadores para fomentar (tal como se definen) el desarrollo económico, o sea, incrementar beneficios empresariales y esto sabemos que ya no será posible mucho tiempo sin acabar con el planeta.
En fin, fomentan una acelerada carrera a un enriquecimiento excesivo de pocas personas a costa del resto y un planeta en extinción para los seres humanos.
¡Menuda mierda, como para creérsela!